Si trabajas en Marketing Digital, cuando estás de vacaciones y te apetece desconectar, descansar y relajarte, quieres silenciar conversaciones, grupos, notificaciones y minimizar el acceso a Redes Sociales.Tienes que intentar NO hacer Marketing Online este verano.
Después de estar mínimo ocho horas diarias generando contenidos, haciendo estudios de palabras claves, escribiendo metas, mirando lo que se mueve en el sector y compartiendo información interesante, lo que te apetece es encefalograma plano y que lo más complicado que tengas que ver cada día sea el capítulo de Los Simpson.
La tentación del teléfono móvil con el acceso a todos estos apasionantes universos está ahí, encima de la mesa en el restaurante, junto a ti en el asiento del coche mientras conduces hacia la playa o la piscina… excepto si no hay cobertura ni WiFi.
Estas vacaciones he estado en mi pueblo en Salamanca, donde por supuesto que hay acceso a internet gratis en los bares y restaurantes del pueblo, pero no hay cobertura del operador móvil que yo tengo (Movistar, exactamente).
Esto, que al principio me hizo entrar en pánico, al final se ha convertido en una ventaja para hacer marketing digital en verano, porque cuando vuelva de vacaciones voy a ser más eficiente, proactivo e imaginativo, por lo que no hacer Marketing será la mejor estrategia para hacer un mejor Marketing Online.
Aunque parezca contradictorio te digo a continuación las 10 consecuencias positivas de no tener cobertura y acceso a internet :
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- Tu coco es una olla a presión a estas alturas del año. Deja que descanse. Muchos proyectos, llamadas, reuniones, entregas… Necesitas cambiar el chip unos días, necesitas descansar.
- Lees más en papel. El periódico diario, noticias de a pie, no tan trascendentes como la fusión de Hailo y Mytaxi o la compra de Instagram por parte de Facebook. Incluso puedes leer novelas, cómics…
- Hablas más con la gente. Te das cuenta de que pasas demasiado tiempo mirando al móvil y te estás perdiendo cosas interesantes que ocurren a tu alrededor cada día.
- Te apetece más moverte del sofá y salir a hacer deporte. O pasear por el monte, o nadar en el rio o en el mar…Tampoco hace falta que hagas una preparación para las Olimpiadas de Rio de Janeiro. Además de mejorar tu salud, tu cerebro también se verá recompensado con su dosis diaria de endorfinas que te harán estimular las partes creativas de tu materia gris. Traducción: tendrás mejores ideas cuando vuelvas, incluso ya vas teniendo alguna.
- Darte cuenta de lo que vale el tiempo que tienes. Valorar cada minuto de tu tiempo de otra forma, mucho más relajada, mucho más positiva. Aburrirse no es malo, echarse una siesta es bueno, madrugar para correr entre viñedos te carga las pilas para todo el día, ver ponerse el sol en una terraza con una cerveza en la mano es muy recomendable 🙂
- Ser un “Outsider” y observar cómo usan los demás los dispositivos. Una vez que te conviertes en un abstemio de los móviles y de internet “a gran velocidad” puedes observar desde fuera cómo mientras hablas con tus amigos ellos consultan el Facebook o hablan por Whatsapp, miran su correo o comparten contenidos. Estás haciendo inconscientemente estudio de su comportamiento en el mundo digital: observas y aprendes cosas.
- Puedes descubrir usos diferentes de herramientas digitales que tú usas a diario. Si notas que gente de tu alrededor no conoce Wallapop, no conoce SnapChat, no usa LinkedIn porque es “solo para ejecutivos”, te das cuenta de que no todo el mundo vive en tu burbuja. Puede ayudarte a cambiar tu punto de vista sobre algunos proyectos.
- Te apetecerá cocinar: Si, si, te arrimas por la cocina a curiosear y te pones a hacer una fideuá o una pizza casera. No hace falta que busques la receta en internet, si está tu madre cerca te sacará de cualquier duda que puedas tener en un periquete. A veces, entre ebullición y sofrito, se te ocurrirá una nueva estrategia de contenidos para ese cliente del sector de alimentación con el que llevabas atascado semanas. Y, además, cocinar y comer bien es muy importante para tu salud y para tu humor, lo que se traducirá en más creatividad y mejores ideas para tu agencia y para tu equipo.
- Volverás a escribir: Si, a escribir. Está claro que en la oficina lo haces todos los días. Escribes emails, copys para anuncios en Adwords y Facebook, escribes artículos para el blog y tweets ocurrentes. Pero “escribir de verdad”, de lo que realmente te gusta, incluso de sensaciones y de ideas absurdas tiene su punto de terapia que puede ayudarte a poner en orden tus prioridades y necesidades. Y es mucho más barato que ir al psicólogo, claro.
- Comprarás pastas y dulces supercalóricos para llevar a tus compañeros en la oficina: Es una tradición. Llevar algo rico (y que engorde todo lo posible) de vuelta a la oficina es un “must”, para contar las vacaciones a los compañeros con una taza de café delante mientras te ponen al día de las novedades y los avances en los proyectos de forma más relajada. Es una forma de hacer el aterrizaje y la vuelta a la rutina un poco más leve y con una sonrisa.
Así que ya sabes, si trabajas en Marketing Digital, vete de vacaciones y apaga tu móvil y tu ordenador. Inténtalo al menos. Creo que a la vuelta al trabajo lo vas a agradecer. En serio, no hacer marketing online a veces es lo mejor para el marketing de tu negocio.